sana tus intestinos para sanar tu tiroides

Sana tus intestinos para sanar tu tiroides

En realidad la salud de todo tu cuerpo depende de tu microbiota. Cada una de las familias de los más de cuarenta mil millones de microbios que te habitan, tiene funciones específicas que dan lugar a los procesos biológicos de tu cuerpo.

¿Fácil y en un párrafo?

El hipotiroidismo no es “de por vida” y no deberías tomar hormonas sintéticas más allá de un corto período. Dependiendo de la cantidad y variedad de bacterias que haya en tu intestino, puede empeorar o mejorar tu función tiroidea. O sea, si sanás tus intestinos, sanás tu tiroides.

Pero también hay muchos otros factores que están influyendo directamente en tu metabolismo tanto como en tu salud tiroidea. Si es el caso, creo que te convendría pegarle una mirada al contenido de mi MasterClass sobre Salud Tiroidea, una herramietna completa y poderosa para sanar tu tiroides que cuenta además con una garantía del 100% de reembolso si no estás conforme con su contenido.

Un estudio que analizó a mujeres con cáncer y nódulos en la tiroides, y pacientes sanos, descubrió que los primeros dos grupos tenían un sobrecrecimiento de bacterias de la familia Neisseria y Streptococcus, mientras que las de Butyricimonas y Lactobacillus eran notablemente más bajas.

A finales de los 80’s un estudió encontró que ratoncitos mantenidos en condiciones libres de patógenos tenían mayor resistencia a la hora de desarrollar una Tiroiditis de Hashimoto (TH) inducida.

En otros estudios se pudo observar una diferencia morfológica intestinal de pacientes con TH respecto de pacientes sanos: tanto en la vellosidad como en la permeabilidad intestinal, además de cambios poblacionales: reducción de Bacteroidetes y aumento de Alistipes en los pacientes con TH.

Otro estudio sobre 60 pacientes con hipotiroidismo probó los efectos de acompañar la levotiroxina con simbióticos (probióticos+prebióticos) durante ocho semanas: los resultados indicaron que el grupo que recibió el suplemento redujo más los niveles de TSH y estabilizó mejor los niveles de T4.

Finalmente, se pudo comprobar que la desconjugación bacteriana realizada en un intestino sano reduce la pérdida de hormona tiroidea en la materia fecal, permitiendo el reciclaje enterohepático de la misma.

Algunos estudios que aclaran un poco más la situación:

https://link.springer.com/article/10.1007/s12020-018-1831-x

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC1541533/

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/31987229/