colesterol estatinas efectos secundarios

El colesterol puede llevarte a otras enfermedades (pero no de la forma en que pensás)

¿Cortito y en un párrafo? Los efectos secundarios de las estatinas a mediano y largo plazo terminan destruyendo la salud. Las evidencias sobre diabetes, problemas de memoria y daño hepático son tan grandes que hasta la FDA obligó a incluirlo en los prospectos en EEUU. Numerosos estudios dan cuenta de insomnio, disfunción sexual, depresión, ansiedad y osteoporosis.

Pensemos en Susana: una señora que pasó los 50 años que se hace un “chequeo de rutina” en donde le encuentran un colesterol total de 220.

Nadie pone atención en que su glucosa basal es normal al igual que sus triglicéridos. Incluso su relación LDL/HDL es buena. Pero simplemente, alguien dice “ese colesterol es peligroso” y a partir de ahora, Susana tiene que tomar estatinas.

Susana hace caso y comienza a tomar estatinas. A las pocas semanas, se da cuenta de que está más cansada de lo habitual, pero piensa que deben ser los años. Algunos meses después tiene dolores musculares cada vez más frecuentes y problemas para conciliar el sueño. Pero bueno, los años no vienen solos.

Un año después, se vuelve a hacer análisis… Curiosamente, la glucosa está un poco más alta, arañando la pre-diabetes, y el colesterol apenas bajó a 210, a pesar de que hizo una dieta casi sin carnes, sin crema, sin manteca, y tomó la medicación.

Entonces su proveedor de fármacos designado decide aumentar la dosis de estatinas, lo que en el transcurso de un año reduce notablemente su producción estrogénica, no sólo destruyendo su líbido, sino también contribuyendo a desarrollar un cuadro de osteoporosis.

Es así que Susana, que no tenía ninguna enfermedad, sino un cuerpo sano que producía colesterol para mantener sus tejidos, hormonas y neurotransmisores, ahora tiene diabetes, depresión y osteoporosis. Eso sí, su colesterol bajó a 190.

Ancel Keys con su estudio de los 7 países, logró convencer a toda la comunidad “científica” de que un colesterol elevado era sinónimo de riesgo coronario. Más de 40 años pasaron, muchísimas revisiones se hicieron, ya está completamente descartado ese axioma, pero parece que quienes recetan estatinas aún no se enteraron. O tienen relaciones demasiado íntimas con los laboratorios.

Algunos estudios:

Estatinas y osteoporosis:

https://ard.bmj.com/content/78/12/1706

Estatinas y diabetes:

https://journals.sagepub.com/doi/pdf/10.4103/0976-500X.136097

(Algunos estudios experimentales apoyan la hipótesis de que las estatinas pueden causar diabetes al alterar la homeostasis de la glucosa, tanto por alteración de la secreción de insulina como por disminución de la sensibilidad a la insulina.)

Estatinas y depresión, ansiedad y desórdenes de sueño:

https://europepmc.org/article/med/9411859

Estatinas e insomnio:

https://link.springer.com/article/10.1007/s40264-014-0163-x