Cuando el otro día escribí acerca de los edulcorantes, muchas personas me preguntaron acerca de la estevia, ya que se generaron muchas dudas. Es por eso que hoy quiero dedicarle este post.
Lo bueno y lo malo de la estevia
La Stevia rebaudiana de Bertoni, más conocida como estevia, es una plantita de origen sudamericano que tiene muchas propiedades para mejorar el metabolismo, entre ellas, el control de la glucosa. Tiene además un sabor dulce que se lo debe a sus esteviósidos de glicol, lo que ha hecho que la industria alimenticia, en un nuevo episodio de “estropeemos lo que nos da la naturaleza”, haya concentrado en polvitos y liquiditos, para que comas “sin culpas”, “sin engordar” o “cuidándote”.
Lo cierto es que la estevia en su versión artificial sólo da sabor dulce sin ninguna propiedad curativa. Y ese sabor dulce, no se acompaña en ningún caso con la correspondiente cantidad de glúcidos o carbohidratos, ni con ningún otro componente presente en la planta en su forma natural que actúe sinérgicamente. Por lo tanto, el efecto disruptivo del eje cerebro/páncreas/metabolismo es el mismo que con cualquier edulcorante sintético: tus papilas gustativas perciben dulce, el cerebro lo interpreta como azúcar y le indica al páncreas liberar insulina para que tus células absorban ese azúcar que no llegará (o lo hará en cantidades inferiores a las esperadas). Es por esto que no deberías consumir estevia industrializada; es preferible el azúcar o la miel, ya que al menos tu cerebro sabe a qué se está enfrentando.
Uso medicinal de la stevia
Ahora, sí que podés hacer un uso medicinal de la planta. Se pueden masticar las hojitas frescas o hacer infusión o tinturas, secar y pulverizar para agregarla pulverizada al mate u otras bebidas, o incluso comidas (en Paraguay se agrega a salsas y estofados).
Entonces, te cuento ahora para qué sí es muy buena la Stevia en su estado natural:
- Diabetes u obesidad: no sólo reduce la glucosa en sangre, sino que además potencia la secreción de insulina y reduce la hemoglobina glicosilada.
- Antioxidante: gracias a sus compuestos fenólicos y su alto contenido de folato y ácido ascórbico, ayuda a mantener a raya los radicales libres.
- Estabiliza niveles de colesterol LDL/HDL, reduce los triglicéridos y aumenta la carnitina. Disminuye los marcadores del síndrome metabólico.
- Mejora algunos marcadores de pacientes con problemas renales; aumenta el flujo plasmático y la vasodilatación renales.
- Es hipotensora: su función diurética ayuda a eliminar el exceso de sodio y además es vasodilatadora y cardiotónica.
- Antibacteriana, antifúngica y cicatrizante: un estudio encontró que tiene mayor efectividad que la povidona (un antiséptico) en la recuperación de heridas, y también se comprobó que detiene la diarrea.
- Como inmunomodulador: aumenta la inmunidad celular y la función fagocítica.
- Cáncer: inhibe la proliferación de células cancerosas en el sistema gastrointestinal, aumentando su apoptosis mitocondrial y citotoxicidad pero disminuyéndola en las células sanas.
- Caries dental: las hojas de Stevia ayudan a reducir en la boca la población de bacterias causante de caries.
¿Cómo consumirla?
- Hojas frescas para masticar:
- Hojas secas, enteras o pulverizadas para agregar al mate o infusiones;
- Tintura madre para un uso terapéutico más intenso.
Comenzá a leer y informarte más: no todo es igual, no es lo mismo la estevia natural que sus derivados industriales, no todo lo que venga en una cajita verde sin calorías ni colesterol es saludable.
Fuentes:
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC8600158/
https://revistas.unal.edu.co/index.php/actaodontocol/article/view/61751