hipotiroidismo y microbiota

El hipotiroidismo y su relación con la microbiota intestinal

¿Nunca te preguntaste por qué tantas personas tienen problemas de tiroides? Y más importante aún ¿Por qué la única solución que ofrece el sistema es el reemplazo hormonal de por vida? ¿Tan equivocada puede estar la naturaleza? ¿No hay nada que puedas hacer?

La tiroides controla el ritmo metabólico de todas las células. Regula el crecimiento, la diferenciación celular y la generación de energía a partir de los alimentos que ingerimos.

La producción de la hormona tiroidea depende del sistema organizado de retroalimentación que implica la liberación de la TSH desde la hipófisis, estimulando la síntesis y liberación de tiroxina (T4) y algo de triyodotironina (T3). Pero la mayor parte de conversión de T4 en T3 se produce en los tejidos periféricos a través del sistema de enzimas de la deiodinasa.

Hay algunos nutrientes clave que intervienen en el camino: el yodo y el hierro son esenciales en la síntesis de T4 y T3, y el selenio y el zinc son cruciales para múltiples pasos, especialmente en la conversión de T4 en T3 activa.

Ahora, la microbiota juega un papel vital en todo este proceso y te cuento por qué:

– Hierro: las bacterias beneficiosas (lactobacilos y bifidobacterias), aumentan la absorción de hierro alterando el pH del colon mediante la producción de ácidos grasos de cadena corta (AGCC). En cambio, las bacterias patógenas, se alimentan de hierro, reduciendo su disponibilidad para la producción de la hormona tiroidea.

– Yodo: el yodo se absorbe principalmente en el estómago, el intestino delgado y, en menor medida, en el intestino grueso. Se ha demostrado que la inflamación producida por disbiosis en estas partes superiores del intestino grueso (gastritis, colon irritable) reducen la absorción de yodo.

– Zinc y selenio: influyen positivamente en el mantenimiento de las bacterias beneficiosas, además de ser esenciales en la conversión de T4 a T3.

Un estudio demostró que cuando los ratones recibían probióticos con especies de Lactobacillus reuterii, se producía un aumento de la función tiroidea (mayores niveles de T4, mayor masa de la glándula tiroidea, comportamiento más activo y forma más delgada).

Otro estudio encontró que una microbiota sana tiene grandes diferencias en la capacidad metabólica de la tiroxina en el intestino. Además, la similitud metabólica de las yodotironinas y los ácidos biliares en el intestino también ofrece posibilidades para la correlación entre los niveles de tiroxina y colesterol del huésped.

Finalmente, otro estudio encontró que la capacidad de producción de AGCC del intestino de los pacientes con hipotiroidismo primario estaba significativamente disminuida, lo que provocó un aumento de los niveles séricos de lipopolisacáridos.

¿Conclusión? Tu hipotiroidismo puede estar directamente relacionado con el estado de tu microbiota. Animate a tomar mi curso de Salud Intestinal y Microbiota que comienza pronto: te ofrece una gran oportunidad de construir tu calidad de vida y dejar de depender de la industria farmacéutica.  

https://www.mdpi.com/2072-6643/12/6/1769

https://www.mdpi.com/2077-0383/10/16/3609/htm

https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fcimb.2020.00495/full

https://portlandpress.com/clinsci/article-abstract/134/12/1521/225233/Gut-dysbiosis-is-associated-with-primary